ANÁLISIS TÁCTICO DEL ATLÉTICO DE MADRID (I): ATAQUE ORGANIZADO


Uno de los mejores equipos del mundo visita Nervión y era una buena excusa para retomar un poco el blog. El Atlético de Madrid del Cholo Simeone será el medidor perfecto para saber en qué estado se encuentra la idea de juego de Jorge Sampaoli. El equipo de Simeone, a lo largo de los años, ha evolucionado de forma clara, sin perder su esencia. El modelo de juego siempre sufría ligeras modificaciones -necesarias para permanecer en la élite-, pero en esta temporada los cambios han sido un poco más agresivos. Podemos decir sin temor que es la plantilla con más variantes de las que ha dispuesto el técnico argentino, más profunda y, sobre todo, con más recursos con balón. Los jugadores marcan el desarrollo de los modelos de juego, y la acumulación de perfiles técnicos con balón ha generado una necesidad en el Atlético de Madrid, ser más protagonistas.

Hasta ahora, al Atlético le bastaba una trabajada defensa posicional y una buena gestión de las transiciones. Convivía con el repliegue bajo y la intensidad en las recuperaciones. La nueva plantilla exige más riesgos para potenciarse a sí misma, y el Cholo los ha asumido encantado. Y la adaptación ha sido brillante. Lejos de suponer una dificultad, el Atlético de Madrid es uno de los equipos que mejor gestiona la posesión de Europa, y que más variantes dispone en su trabajado sistema para generar juego interior -quién nos lo iba a decir-. Puestos los necesarios preámbulos, vamos a analizar lo más importante del equipo colchonero. 

ATAQUE ORGANIZADO

FASE DE INICIO: SALIDA DE BALÓN

Incidimos en la primera fase de trabajo de un ataque organizado, la salida de balón, y destacamos especialmente a dos jugadores por su contribución ineludible. El Atlético de Madrid ha tenido que profundizar en su juego posicional porque los rivales ya empiezan a esperarle atrás. Ahora necesita más la pelota que antes, al menos en el 80% de sus enfrentamientos, y se ve en la necesidad de gestionar la pelota ante rivales en repliegue. Para ello, es era inevitable un fortalecimiento de su juego de posición y de la productividad de sus fases con balón.

El inicio del juego del Atlético de Madrid rara vez comienza en los centrales. Godín o Savic son muy buenos para jugar en campo contrario, pero no conducen ni dividen cuando salen desde atrás. El talento en el pase no es una de las virtudes de la pareja de centrales del Atlético, así que las responsabilidades en salida recaen, generalmente, en Koke y Filipe Luis, cuando se busca una más organizada, y Gabi + Juanfran cuando se pretende mayor verticalidad o la salida por el perfil izquierdo se encuentra taponada. 

Sin embargo, no es menos cierto que debería potenciarse una salida desde los centrales, a fin de nutrir de más recursos al ataque posicional. De momento, los equipos no presionan a los centrales del Atlético de Madrid en esa fase de inicio, pero terminarán haciéndolo, y más vale que el equipo sepa cómo construir una salida solvente antes de que el rival asiente su presión sobre la pareja de centrales colchoneros. Ante el Celta pudimos ver varias situaciones en las que la acumulación de receptores interiores generaba un espacio a la espalda de la presión del Celta que bien podía aprovecharse con un pase vertical desde la línea de centrales.


Filipe es un jugador con infinitos recursos asociativos. El Atlético de Madrid frecuenta su perfil izquierdo para potenciar su juego organizado, porque en esa zona acumula a sus jugadores más productivos en fases de juego posicional. Filipe + Koke para sacarla son una fuente inagotable de soluciones con balón. Si no encuentran salida por el perfil izquierdo, Gabi + Juanfran generan una nueva alternativa, mucho menos pausada pero más directa. 


En la anterior imagen, Koke recibe la pelota en la base de la jugada, el Atlético vuelve a acumular muchos hombres por dentro y Filipe abre una línea de pase limpia para salir por fuera. Un solo pase puede superar hasta 4 futbolistas del Valencia. 


En las anteriores imágenes hemos mostrado cómo consigue el Atlético de Madrid salir desde atrás. Bien es cierto que no está sufriendo una presión muy alta, por lo que en muchas ocasiones la fase de salida se limita a conducciones hasta el centro del campo, recepciones de Koke en una altura media y entrando directamente en la fase de progresión, donde se producen los movimientos más interesantes en el cuadro del Cholo. 

FASE MEDIA: PROGRESIÓN

Una vez que la pelota se instala en campo contrario... ¿cómo ataca el Atlético de Madrid? En esta fase en concreto, los recursos se multiplican. El lado organizativo se vuelca sobre el perfil izquierdo, con Koke - Filipe - Griezmann, mientras que el vertical tiene lugar en banda contraria con Gabi - Juanfran - Saúl - Correa - Gameiro. 


El concepto de hombre libre -o tercer hombre- es uno de los principios fundamentales del juego de posición, y el Atlético de Madrid cada vez encuentra más facilidades para que surja. En las dos próximas imágenes vemos uno de sus comportamientos típicos, un jugador se ofrece y arrastra las marcas y otro aparece a la espalda -hombre libre-. 



El Atlético se asienta sobre el perfil izquierdo, combina, genera atenciones, atrae marcas, y a la espalda de la línea de presión rival se sitúa Saúl, que recibe libre de marca -concepto tercer hombre- y conduce para completar la fase de progresión. 


Esa acumulación de hombres en banda izquierda genera oportunidad de progresión y llegada a zona de finalización en banda contraria, donde Juanfran permanece abierto para facilitar la descongestión del juego.


En el siguiente fotograma, nuevamente, el Atlético vuelca su juego sobre el perfil izquierdo -lado asociativo- y profundiza por el derecho -lado vertical- aprovechando el desplazamiento en largo de Koke. 


Sin embargo, en el desarrollo de este concepto, a veces falla la aplicación. Se producen muchas situaciones en las que Juanfran permanece centrado y el Atlético se ahoga en un embotellamiento central. Hablar de los ataques del Atlético de Madrid y pasar de puntillas por Griezmann no se correspondería con un análisis riguroso. El crack del Atlético de Madrid empieza a tener relevancia justo cuando el equipo consigue instalarse en campo contrario. A partir de ahí, Griezmann es, en un porcentaje muy elevado, la clave absoluta del sistema. 


El Atlético ha conseguido producir fases muy interesantes con balón. Organiza bien sus ataques. Los laterales, aunque no siempre, generan la amplitud necesaria para estirar al rival y para entrar por dentro, o en su defecto ofrecen una nueva vía para profundizar. El Atlético llega mucho por los costados, y tanto Juanfran como Filipe Luis son dos activos en los últimos metros. 

Griezzmann suele asociarse en la izquierda. Le gusta arrancar desde atrás y acelerar la jugada. Es un enorme conductor. El cambio de velocidad en la jugada es fundamental a la hora de superar líneas y girar los sistemas defensivos rivales. Y Griezmann es, entre otras muchas cosas, el ritmo del Atlético de Madrid. 


Como decíamos con anterioridad, el problema de juntar a todos por dentro es que al equipo, a veces, le cuesta encontrar la amplitud. Y en el fútbol es una máxima. Si quieres atacar bien por dentro tienes que ser capaz de abrir el campo por fuera. Si queremos destacar uno de los recursos más importantes del Atlético de Madrid es, sin lugar a dudas, el de Ángel Correa. El jugador argentino quizás sea más importante sin balón que con él, pero su influencia en todo el frente de ataque es notoria. Aparece por todas las zonas, detectando y ocupando los espacios más útiles. Esta función es importante, porque permite cierta organización posicional que facilita los ataques y estira los sistemas defensivos, mucho más frágiles cuando los atacantes ocupan todas las zonas de ataque. Pero es que, además, sus conducciones meten al Atlético en la fase de finalización, la que vamos a tratar a continuación.

FASE FINAL: FINALIZACIÓN

El Atlético es un equipo con infinitas posibilidades en zona de remate. Suele cargarla con Gameiro -fijo- y Griezmann llegando en carrera. En el pico del área se encuentra el lateral de la banda por la que no se está profundizando, y jugadores como Koke o Gabi llegan desde atrás para activar segunda jugada o buscar un disparo lejano tras rechace. 

Carrasco tiene capacidad para encarar escorado, para buscar desborde exterior + centro o para desbordar por dentro y aprovechar su enorme disparo -gol al Bayern Münich que sirve de buen ejemplo-. También sabe sumar desde atrás, llegando en carrera -tercer gol al Granada-. Gameiro y Griezmann son muy buenos rompiendo a la espalda de la línea defensiva buscando un pase interior, y no es extraño que puedan definir constantemente en ese tipo de situaciones. Correa, cuando juega, también suele cargar la zona de remate. Hay que rellenar los huecos para dividir las marcas y que las opciones se multipliquen, pero nunca descuidar la zona de rechace, no solo por lo que puedes conseguir en un disparo en segunda jugada, sino como mecanismo defensivo para evitar que el rival lance las contras.



Este es, a grandes rasgos, el ataque organizado del Atlético de Madrid. En próximas entregas trataremos la defensa posicional, su comportamiento tras pérdida, o su presión adelantada. Que disfruten. 

1 comentario:

  1. El Atlético del Cholo es un equipo muy rico tácticamente hablando, y más con la vuelta de tuercas que el Cholo le ha dado esta temporada al sistema. Ya no solo son un equipo con un excelente trabajo defensivo, si no que en ataque están a un nivel que no hay sistema defensivo capaz de anularlos.

    Respecto a lo que comentas en la salida de balón ¿Crees que sería más efectivo presionar a Savic + Godín? ¿O sería mejor dejarles libertad para sacar la pelota y cerrar las líneas de pase a Koke - Gabi - Filipe? Yo personalmente pienso que la segunda opción sería más efectiva al ser dos centrales que no son capaces de dividir en la salida.

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